Comúnmente conocido como guante kessa, es el accesorio indispensable e indisociable del jabón negro durante el ritual de la exfoliación oriental.
Tras la aplicación del jabón negro, termina frotándote enérgicamente el cuerpo con el guante negro. Así se eliminarán las pieles muertas y las impurezas. Además, se activará la circulación sanguínea.